''El agua sale limpia'': ecosistemas, seguridad alimentaria y adaptación al cambio climático en Mesoamérica
De Genowefa Blundo Canto y Maria Claudia Tristán Febres Investigadores del grupo de Servicios Ecosistemicos de CIAT están trabajando en el desarrollo de una metdologíá para monitorear y evaluar resultados de seguridad alimentaria (SA) vinculados a la Adaptación basada en Ecosistemas (AbE), es decir el uso de la biodiversidad y servicios ecosistémicos para apoyar a las personas en el proceso de adaptación frente a los impactos adversos del cambio climático.
Este blog es el primero de una serie que ilustra el trabajo de investigación que se desarrollará en varios sitios de Mesoamérica en conjunto entre el CIAT y la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) adentro del proyecto de UICN en Mesoamérica ‘’Adaptación, Vulnerabilidad y Ecosistemas” (*). En esta serie de blogs conoceremos las historias de pescadores y agricultores que junto a equipos técnicos locales han implementado estrategias de AbE de acuerdo a sus necesidades, alcanzado cambios positivos que buscan ser potenciados con el proyecto “Adaptación, Vulnerabilidad y Ecosistemas”. Entre el 25 de Mayo y el 9 de Junio 2016 recorrimos los sitios piloto en 5 países, junto a representantes de UICN Costa Rica. En cada lugar nos acompañaron los socios locales y los beneficiarios, quienes nos enseñaron las intervenciones realizadas, sus aprendizajes y prospectos. El objetivo de la gira fue entender los contextos, conocer el trabajo realizado in situ y compartir nuestra propuesta de sistema de M&E con los socios para finalmente ajustar el sistemas y las herramientas de acuerdo a las condiciones locales. Aquí presentamos el primer blog de la serie, dedicado a la Micro cuenca Buena Vista y a la cuenca del Río Cahoacán en México. Conquista Campesina: canales que dan vida El territorio del ejido Conquista Campesina, ubicado en el estado de Chiapas comprende un área de 800 hectáreas, de las cuales 500 son manglares. Esta área se encuentra en la parte baja de la cuenca Río Cahoacán y es conocida como Gancho – Murillo. Está catalogada como Reserva Ramsar, es decir es una zona de humedales de importancia internacional. Las familias del ejido se dedicadan principalmente a la pesca en el manglar, la agricultura comercial, y en menor medida, a la ganadería. Durante el verano, los pobladores se dedican a la pesca en el río. De ahí extraen diferentes variedades de peces y camarones. Los peces sirven para buena parte de la alimentación del hogar y para venta, mientras que los camarones son principalente para venta. Durante el invierno, es decir en la temporada de lluvias, las familias dedican la mayor parte de su día a los cultivos, principalmente banano, mango y frijol. La cosecha del banano, y sobretodo el mango ataulfo, es vendida en el mercado local. Durante esta temporada la pesca pasa a segundo plano por la ausencia de recursos acuíferos para venta y para permitir la reproducción de las especies en el manglar. Uno de los principales problemas para los pescadores de Conquista Campesina son las consecuencias de las fuertes lluvias en el asolve de las pampas (acumulación de sedimento en el río). Las lluvias arrastran tierras desde la parte alta de la cuenca Cahoacán y terminan en las zonas bajas, acumulando gran cantidad de tierra y lodo en los ríos, principal fuente de alimentos e ingresos para la población de Conquista Campesina. Juan Carlos, pescador y ejidatario de Conquista Campesina cuenta los problemas que trae el asolve de sus pampas y lo que hace falta hacer para que el trabajo que realiza en los manglares sea exitoso Al problema de la acumulación de sedimento se suma la ganadería extensiva que toma áreas de manglar para convertirlas en zonas con pasto. Frente a estos problemas UICN México implementa medidas de protección, conservación y uso sostenible en el manglar. Entre ellas se encuentra la reforestación del manglar con especies nativas (mangle blanco), y la limpieza y apertura de canales. Actualmente cuentan con siete canales que permiten un flujo constante de agua. Para XXX los “canales son los que les están dando vida a nuestro manglar, y a nosotros también porque ahí agarramos los peces y los camarones que nos dan de comer”. El principal desafío para el ejido es crear conciencia sobre los usos no sostenibles en las diferentes actividades locales. La expansión agrícola de cultivos como el banano y el mango, así como el uso desmedido de áreas de pastos se tornan en una amenaza creciente para el buen funcionamiento del manglar y la sostenibilidad de los medios de vida de la población. (*) El proyecto busca crear planes de adaptación al cambio climático basada en ecosistemas en la micro cuenca Bajo Yorkin (Costa Rica – Panamá), micro cuenca media Sixaola (Costa Rica – Panamá), micro cuenca El Aguacate (El Salvador – Guatemala), Micro cuenca Buena Vista (México), la sub cuenca del río Sumpul (El Salvador) y la cuenca del río Goascorán (Honduras-el Salvador). Las medidas de adaptación a implementar incluyen fortalecimiento de la estructura de gobernanza local, recuperación de áreas degradadas mediante prácticas de conservación de suelos y reforestación, manejo sostenible de cultivos, modelos sostenibles de diversificación productiva, protección de fuentes de agua e inversión en infraestructura verde.